El príncipe Harry reflexionó sobre su vida en Estados Unidos junto a Meghan Markle y sus hijos, destacando que siente que está viviendo “la vida que mi mamá quería para mí”. Estas palabras las compartió durante su participación en la conferencia DealBook del New York Times en Nueva York, el miércoles. Desde que dejó la vida real en 2020 y se mudó al otro lado del Atlántico, Harry, de 40 años, ha abrazado su nueva realidad.
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“Disfruto vivir aquí [en Estados Unidos] y criar a mis hijos en este lugar. Es una parte de mi vida que nunca pensé que iba a vivir, y siento que es lo que mi mamá quería para mí”, expresó en conversación con el anfitrión Andrew Sorkin, refiriéndose a la fallecida princesa Diana.
El príncipe Harry y su esposa Meghan Markle se mudaron de Reino Unido ante el asedio de la prensa
Mientras Harry participaba en el evento en Nueva York, Meghan Markle, de 43 años, asistía a una gala en Beverly Hills junto a su amigo Tyler Perry. El duque también abordó preocupaciones sobre seguridad, destacando los desafíos que enfrentaron tras dejar el Reino Unido. “Nunca debieron haberme retirado la seguridad en primer lugar”, afirmó. Además, mencionó que el proceso de divulgación relacionado con estos temas ha sido “perturbador e iluminador” y que espera resoluciones en abril.
En cuanto a su vida personal, Harry expresó su deseo de ser “el mejor padre y el mejor esposo”. También reflexionó sobre cómo sus años en el ejército han moldeado sus principios. “Lo que quiero que la gente recuerde es que siempre me mantuve fiel a mis valores y principios”, añadió. Respecto a los rumores recientes de separación, Harry desestimó las especulaciones con humor. “Aparentemente hemos comprado o cambiado de casa 10 o 12 veces. También nos hemos divorciado 10 o 12 veces según los rumores. Es difícil seguir el ritmo, pero lo ignoramos”, comentó.
Además, lamentó cómo los trolls alimentan estas historias. “Me siento mal por ellos. Sus esperanzas crecen y luego no pasa nada. De verdad, me dan pena”, bromeó. La aparición de Harry en Nueva York ocurre solo dos meses después de su última visita, cuando participó en eventos relacionados con la Asamblea General de las Naciones Unidas y la Semana del Clima. Su vida, ahora alejada de las presiones de la realeza, parece estar alineada con el legado que su madre, Diana, soñó para él.
