Esta historia de seguro te pondrá los pelos de punta y te dejará reflexionando sobre una gran cantidad de cosas, pues los últimos minutos de este preso sentenciado a muerte y sus declaraciones han estado dándole la vuelta al mundo y llamando la atención de las personas en ambos lados de la polémica discusión sobre la validez de la pena de muerte.
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En varias partes del mundo la pena de muerte se sigue aplicando, lo cual mantiene la polémica viva y cada cierto tiempo los medios se topan con una historia que lleva al publico general a reflexionar sobre el tema, los pros y los contras de tener dicha condena dentro del sistema de justicia, como lo es en el estado de Oklahoma.
Las increíbles declaraciones de un hombre sentenciado a muerte justo antes de morir y su impresionante historia
El jueves 12 de enero de 2022 se llevó a cabo la ejecución de James Eizember, un hombre de 62 años en una prisión en el estado de Oklahoma. Eizember había sido el perpetrador de un asesinato doble y una agresión grave hace ya casi dos décadas, acabando con una familia.
El hombre fue declarado culpable de asesinar a una pareja de ancianos, AJ Cantrell, de 76 años, y Patsy Cantrell, de 70 años, el 18 de octubre de 2003. El sobrino de la pareja comentó “Después de vivir esta pesadilla, debo decir que 20 años es demasiado tiempo para que se haga justicia”.
Por su parte, Eizember recibió su última comida a las 5:10 pm del miércoles y dejó como últimas palabras un sencillo “Estoy en paz”, para luego levantar la cabeza y decir a su hija un último “Te amo”.
El terrible crimen de James Eizember
El día del crimen, Eizember irrumpió en la casa de PJ y Patsy para vigilar a su exnovia, Kathryn Smith, que vivía al otro lado de la calle, pero cuando los septuagenarios volvieron a casa, James disparó a la mujer, para luego acercarse a PJ y matarlo a golpes con la misma arma.
Además de esto, Eizember atravesó la calle, entró a la casa de su exnovia y agredió tanto a su hijo como a su madre antes de huir de la escena en un vehículo robado para luego huir de la policía hasta Texas, donde recibió un disparo de un hombre que intentó tomar como rehén.