La muerte de un ser querido, rupturas, rechazo, traición, circunstancias económicas difíciles son algunas de las circunstancias que generan tristeza en las personas. Lo que muchos saben es que este decaimiento emocional puede afectar negativamente al cuerpo y causar diversas enfermedades, principalmente si se extiende en el tiempo.
PUBLICIDAD
El tema lo expuso el portal Mejor con Salud que indicó que el estado anímico de tristeza causa sensaciones cerebrales que impactan significativamente en todo el organismo. No sólo causa enfermedades, sino que puede empoderar las que ya padece el individuo.
Sistema inmune
El citado medio mencionó un estudio de la Universidad Politécnica de Valencia que establece que estar triste afecta el sistema inmune, mejor conocido como las defensas del organismo, de tal forma, que el cuerpo se hace más susceptible a padecer distintas enfermedades.
Unas de las patologías más producidas por la tristeza son aquellas de origen inflamatorio. Además, los circuitos cerebrales del dolor físico y emocional se solapan.
Temperatura
La tristeza puede aumentar la sensibilidad al frío.
Falta de apetito
No es de extrañar, que quien tenga una tristeza, no tenga ganas de comer, algo que a su vez repercute en el peso corporal. La persona puede experimentar fatiga y mareos, también aumento del colesterol o problemas del corazón por ingerir mucha comida chatarra, dice la Revista Médica de Chile.
Estrés
Es una emoción que aumenta el cortisol, conocida como la hormona del estrés. Por ello, se ve afectada la calidad del sueño, el nivel de azúcar en la sangre y la presión sanguínea. La idea de que el problema no tiene solución dispara los niveles de forma negativa.
PUBLICIDAD
Disminuye el nivel de serotonina
La tristeza baja los niveles de serotonina, que es conocida como la “hormona de la felicidad”.
¿Qué hacer?
Mejor con Salud aconseja que si hay ganas de llorar, lo mejor es hacerlo. Las lágrimas ayudarán a drenar la tristeza. Toda la presión que se acumula por esta emoción negativa, sale llorando. Quienes reprimen sus lágrimas, sufren más y tienen más riesgos de enfermedades cardiacas.
Por eso, si quieres llorar, entonces llora. También es recomendable, hacer actividades que te gusten (bailar, escuchar música, hacer deporte), ya que de esta manera, te ayudarás a ti mismo, a sentirte mejor.
Hay quienes plantean la conexión espiritual. Quienes creen en un Ser Supremo, por lo general, suelen tener más fuerza para enfrentar una situación difícil, porque entre otras cosas, tienen esperanzas en su Dios, creen que todo pasará y mejorará.
