Dicen que la adrenalina te impulsa a hacer cosas que ni siquiera te imaginas. En un momento de peligro, hay quienes sacan fuerzas de donde creen que no tienen o realizan acciones que nunca han pensado.
Esto fue lo que le pasó a una mujer de 57 años en Francia. La casi sexagenaria sufrió el ataque de un hombre en la calle y como mecanismo de defensa le mordió la lengua, presuntamente le arrancó una buena parte.
El caso lo reseñó el portal británico The Mirror, el cual informó que la mujer paseaba a su perro en Avignon, Francia. Eran aproximadamente las cuatro de la mañana del pasado 19 de febrero.
La fémina se percató de que un hombre la venía siguiendo, así que ella empezó a caminar más rápido y se desviaba un poco de su camino, pero el extraño seguía detrás. Claramente, ella era su objetivo.
El informe policial refiere que el sujeto se acercó a ella, quiso abrazarla y besarla a la fuerza, mientras pasaba sus manos por sus pantalones. Al ver sus manos inmóviles por los brazos del atacante, la mujer solo tenía su boca para defenderse, de tal manera, que mordió la lengua del sujeto con toda su fuerza, tanto que se la arrancó.
Ella regresó a su casa y posteriormente fue con su hijo a la estación de policía, donde entregó la lengua de su agresor como prueba de lo sucedido.
Los policías se movilizaron hasta el sitio del hecho y arrestaron al sujeto. Según The Mirror, estaba ilegalmente en Francia.
Tras su detención, el hombre alegó que fue la mujer quien lo atacó. Sin embargo, cobra fuerza la versión de la señora. El parte policial refiere que el detenido irá a juicio, detalló France Bleu.
El cuerpo reacciona ante el peligro
Está comprobado científicamente que el cuerpo reacciona en momentos de peligro para poder defenderse. Es por eso que en situaciones de riesgo, el organismo libera la hormona adrenalina.
Web Consulta explica que la adrenalina se libera en momentos de estrés, peligro y excitación. Provoca efectos físicos que impulsan al cuerpo a actuar en situaciones extremas.
Precisa que con mayor adrenalina aumenta el ritmo cardiaco, también la respiración, se descompone el glucógeno, se dilatan las pupilas, se expanden los vasos sanguíneos.
Por ejemplo, en una situación de riesgo alguien es capaz de levantar un peso que nunca imaginó para poder salir de debajo de algún escombro, de un carro, o de levantarlo para ayudar a alguien.
En el caso de la mujer que se defendió de su agresor, seguramente la adrenalina la activó a buscar en su mente la mejor manera de defenderse que fue mordiendo su lengua. En una situación normal, alguien tendría asco de morder la lengua de otro y llenarse la boca de su sangre, normalmente no todos tienen la fuerza en su mandíbula para hacerlo.