En una emocionante historia de supervivencia, un reportero de televisión ha compartido su aterradora vivencia mientras exploraba los restos del Titanic en un submarino, una cosa que no muchos pueden hacer, pero él lo vivió en carne y hueso y probablemente nunca lo olvide.
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El Dr. Michael Guillen, antiguo editor de ciencia de ABC, recordó un incidente que estuvo a punto de costarle la vida en 2000. El incidente fue recordado por Guillen después de que se diera a conocer que un grupo de personas se encontraran en una situación similar a bordo de un submarino operado por OceanGate Expeditions
Atrapado en un submarino, el terror que atravesó el doctor Michael Guillen
El suceso en el que un grupo de personas, incluido el multimillonario británico Hamish Harding y el empresario Shahzada Dawood se han quedado atrapados en el fondo del mar ha dado mucho de qué hablar mientras el rescate está en marcha, ya que el oxígeno se agota rápidamente y el tiempo corre en su contra.
Por lo que, Guillen compartió un video en Twitter que mostraba imágenes de su experiencia y un diagrama en 3D. En el video, explicó cómo, al acercarse a la popa del famoso barco, se encontraron atrapados en una fuerte corriente submarina que los empujaba hacia uno de los colosales propulsores de 21 toneladas.
Las imágenes de la cámara externa del sumergible mostraron el impresionante tamaño del propulsor y la nitidez de sus cuchillas. El equipo intentó retroceder, pero se encontraron con una resistencia inesperada. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que estaban atascados debajo de los restos de la popa del Titanic.
Una situación de vida o muerte al explorar el Titanic
La situación se volvió aún más peligrosa, ya que el oxígeno disponible se agotaba rápidamente. Afortunadamente, Guillen y su equipo lograron liberarse y regresar sanos y salvos a la superficie. Sin embargo, el incidente dejó una profunda impresión en ellos, demostrando lo impredecibles y peligrosas que pueden ser las expediciones a grandes profundidades submarinas.
La historia de Guillen sirve como recordatorio de los riesgos involucrados en la exploración submarina y la importancia de tomar precauciones adecuadas. En el caso reciente, el sumergible Titan, propiedad de OceanGate, supuestamente lleva solo 96 horas de oxígeno de emergencia, lo que ha puesto a todos los rescatistas en una posición complicada.
