Hubo muchas cosas agradables del equipo de baloncesto de Estados Unidos el lunes. Y muchas más que no gustaron.
PUBLICIDAD
Anthony Davis anotó 17 puntos y descolgó 14 rebotes, Tyrese Haliburton se presentó con un par de triples tardíos que ayudaron a contener una caída libre de los estadounidenses, que derrotaron 98-92 a Australia el lunes para mejorar a 2-0 en su serie de cinco partidos de preparación de cara a los Juegos Olímpicos de París.
Devin Booker consiguió 16 unidades por EE.UU., Anthony Edwards aportó 14 y tres jugadores — LeBron James, Bam Adebayo y Joel Embiid — terminaron con 10 por los estadounidenses, que fungirán como locales en un par de partidos de exhibición en Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos, esta semana. El miércoles jugarán contra Serbia.
Jock Landale anotó 20 puntos por Australia, que obtuvo 17 de Josh Giddey y 14 de Dyson Daniels.
Estados Unidos llegó a tener ventaja de 24 unidades a mediados del tercer cuarto, pero la vieron recortada a seis con 5:05 por jugar después de que Australia montara una racha de 39-21. Pero Haliburton registró los siguientes seis puntos con sus triples, extendiendo la delantera a 92-80.
Australia se acercó a cuatro en dos oportunidades separadas, pero Booker acertó 4-de-4 desde la línea en los últimos 8 segundos para asegurar que Estados Unidos saliera con la victoria.
“En el tercer cuarto empezamos a perder el balón”, dijo el entrenador estadounidense Steve Kerr. “Perdimos un montón de puntos en la canasta. Cortes hacia atrás, rebotes ofensivos y demás, el juego cambió. Es una buena lección para nosotros. Es mejor aprender esa lección ahora que más tarde. Pero le doy mucho crédito a Australia. Eran geniales. Pelearon. Eran realmente físicos”.
PUBLICIDAD
Al igual que en el partido de Canadá, la llamada segunda unidad (Haliburton, Jrue Holiday, Adebayo, Davis y Booker) cambió el juego.
Ese era el grupo en la cancha cuando los estadounidenses tomaron un juego que estaba empatado 19-19 con 3:15 restantes en el primero y lo convirtieron en una ventaja de 39-23, una racha de 20-4 en un lapso de poco más de 5 minutos.
Kerr utilizó ese grupo como para abrir la segunda mitad. Pero ya se ha convertido en una tendencia clara: cuando Estados Unidos usa a su banca y reemplaza a “All-Stars” con otros “All-Stars”, será un problema enorme para los oponentes que no tienen ni de lejos el mismo nivel de profundidad.
“La fuerza de nuestro equipo es nuestra profundidad y tenemos que utilizar nuestra profundidad”, dijo Kerr.