SAINT-DENIS, Francia (AP) — Este viernes, cuando comience la acción en la pista olímpica, Sha’Carri Richardson, Noah Lyles y el resto de los competidores irán por el oro, un cheque de 50.000 dólares y la oportunidad de despedirse con un tañido.
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Todos los ganadores en atletismo tendrán el honor de hacer que suene la gran campana que lleva la inscripción “París 2024” y que se encuentra en el borde de la pista en el Stade de France.
Como parte del legado de los Juegos Olímpicos de París, la campana eventualmente se trasladará del estadio a un hogar permanente en la reconstruida Catedral de Notre Dame.
“No importa cuán ruidosa sea la multitud, la gente la oirá”, dijo el gran velocista Carl Lewis, quien se unió a Allyson Felix, Marie Jo Perec y al organizador de los Juegos de París Tony Estanguet para probar la campana el jueves.
Estanguet dijo que era una gran manera de interactuar con los aficionados y parte del plan de los organizadores de llevar un poco de la cultura de París a cada sede. Durante la primera semana de los Juegos Olímpicos, el rugby se jugó en el Stade de France y los jugadores se turnaron para tocar la campana.
Ahora, es el turno del atletismo y tocarla será un privilegio, no un derecho.
“Es sólo para los medallistas de oro”, aclaró Estanguet.
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El primero en tocar la campana será el ganador de los 10.000 metros, prueba que coronará la noche inaugural.
Entre los corredores a seguir se encuentran el campeón defensor Selemon Barega y el líder mundial de este año, Yomif Kejelcha, ambos de Etiopía, así como el ugandés Joshua Cheptegei, poseedor del récord mundial.
También estará en juego un premio de 50.000 dólares que World Athletics entregará por primera vez a cada uno de los ganadores de las 48 pruebas olímpicas del atletismo.
Los primeros en cobrar fueron los ganadores de la marcha de 20 kilómetros: el ecuatoriano Brian Pintado y la china Yang Jiayu.
La velocista estadounidense Sha’Carri Richardson estará en la pista el viernes por la mañana para una serie de primera ronda en los 100 metros.
Para Richardson, de 24 años, esa carrera no debería ser más que un calentamiento. En realidad, es la gran favorita, más aún después de que la jamaiquina Shericka Jackson decidió retirarse de los 100 metros.
Noah Lyles abre la acción en la primera ronda el sábado temprano. Luego Richardson regresará a la pista para buscar la medalla de oro.
Lyles llega como el campeón mundial defensor, pero su competencia está lejos de ser un pan comido debido a la aparición de un nuevo nombre en la pista: eljamaiquino Kishane Thompson.
Es Thompson, no Lyles, quien tiene el tiempo más rápido del año con 9,77 segundos. Pero Lyles posee más experiencia en grandes carreras. Estos serán sus segundos Juegos Olímpicos, además de tres mundiales, donde ha ganado seis medallas de oro.
Lyles no ha ocultado su deseo de repetir lo que hizo en el Mundial del año pasado y conseguir el doblete en el sprint.
“Para mí, es otra oportunidad de reafirmar mi dominio”, comentó. “Es otra oportunidad de mantenerme constante, otra oportunidad de continuar con esta búsqueda que he emprendido conmigo mismo”.