Desde que comenzó el grave conflicto bélico entre Rusia y Ucrania el pasado 26 de febrero de 2022, en la actualidad es la primera vez que las tropas de Kiev impactaron duramente el territorio ruso, generando un hito histórico: desde la Segunda Guerra Mundial, nadie había invadido militarmente a la antigua Unión Soviética.
Lo que ha sido sin dudas un inesperado giro de la guerra, Ucrania recuperó en estos últimos días de agosto alrededor de 1.000 kilómetros cuadrados de territorio ruso y 74 localidades de frontera, situación que según la prensa especializada en la problemática territorial, ha generado que Vladimir Putin esté muy furioso, por lo que se espera en los próximos días un pronunciamiento de su parte.
“El jefe estaba de mal humor. Probablemente no se le ha visto así desde que nuestro ejército se vio obligado a retirarse de (la región ucraniana de) Jerson en el otoño de 2022″, dijo un funcionario del Kremlin al sitio ruso Politika.Kozlov.
Avalancha ucraniana en Rusia
La región fronteriza de Kursk, se ha visto impactada desde el 6 de agosto debido a la arremetida ucraniana, misma que ya causó que 120.000 personas fueran desplazadas por los combates.
Según Moscú, el año pasado, combatientes rusos disidentes y soldados ucranianos “disfrazados” de milicianos organizaron una ofensiva, fuertemente armados por Kiev. Pero la incursión fue sofocada tras pocos días de combates y un escaso avance en el terreno.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, indicó la semana pasada que sus tropas ya controlan 74 localidades en la región fronteriza de Kursk. Por su parte, el gobernador regional ruso, Alexéi Smirnov, le dio la razón a Zelenski al admitir la pérdida de 28 poblados. A su vez, el jefe militar ucraniano, Oleksander Sirski, aseguró que sus tropas controlan 1000 km2 de territorio ruso.