ATENAS (AP) — Dos hombres murieron durante la noche en un gran incendio forestal que avanzaba cerca de un balneario costero en el sur de Grecia, según las autoridades.
Unos 350 bomberos asistidos por 18 aeronaves que descargaban agua lograron controlar en su mayor parte el fuego cerca de Xylokastro, en la región del Peloponeso, la madrugada del lunes, según el servicio de bomberos.
Aún quedaban focos dispersos en la zona, pero el gran frente inicial se había apagado, indicaron las autoridades.
Durante la noche se ordenó la evacuación de media docenas de pueblos a modo de precaución después de que comenzara el incendio el domingo. No había amenaza para Xylokastro. Un fuerte viento avivaba las llamas a través de bosques secos tras las altas temperaturas de la primavera y el verano, atribuidas al cambio climático.
Se creía que los dos fallecidos eran residentes de la zona que se habían declarado desaparecidos el domingo, según las autoridades. Se creía que no había más desaparecidos.
No había reportes inmediatos de casas quemadas en la zona afectada, unos 150 kilómetros (93 millas) al suroeste de Atenas.
Otro incendio forestal cerca de Andravida, en el Peloponeso occidental, también fue controlado el lunes, aunque los bomberos permanecían en alerta en la zona por posibles repuntes, indicaron.
Grecia, como otros países del sur de Europa, sufre destructivos incendios forestales todos los veranos que se han visto agravados por el calentamiento global. En los últimos meses las autoridades han tenido que lidiar con más de 4.500 incendios en un paisaje castigado por una prolongada sequía y olas de calor desde el inicio del verano. Esta temporada de incendios se consideró como la más peligrosa en dos décadas.
Una gran inversión en más aeronaves de descarga de agua, drones de vigilancia y otro equipamiento han permitido a los bomberos extinguir la mayoría de los fuegos poco después de que comenzaran. Sin embargo, en agosto un feroz incendio asoló los montes al norte de Atenas, destruyó decenas de casas y mató a una persona.
Aun así, las autoridades dijeron que la superficie quemada este verano es en torno a un 25% menor que la media anual del los últimos 20 años.