KANSAS CITY, Missouri, EE.UU. (AP) — Es fácil pasar por alto a la defensiva de los Chiefs de Kansas City con un Patrick Mahomes, dos veces Jugador Más Valioso de la NFL, o un Travis Kelce, un tight end cuatro veces nombrado All-Pro.
Sin embargo, la ofensiva de Kansas City tuvo problemas la temporada pasada, cuando un débil grupo de wide receivers fueron los culpables de arrastrar al equipo.
Y fue la defensiva del coordinador Steve Spagnuolo la que dio un paso al frente, terminando segunda en la NFL en anotaciones y defensiva total mientras ayudaba a los Chiefs a ganar un segundo Super Bowl consecutivo.
Poco ha cambiado en cuatro semanas de esta temporada.
El grupo de receptores está agotado ahora que Rashee Rice se ha unido a Marquise Brown en la lista de reservas lesionados, y con Mecole Hardman potencialmente fuera para el partido del lunes por la noche contra Nueva Orleans por una lesión en la rodilla. La defensiva ha dado un paso adelante de manera similar para ayudar a Kansas City a un comienzo de 4-0.
Se medirán contra los Saints, que lideran la liga en puntos y están entre los 10 primeros en ataque terrestre y ofensiva total.
Sin embargo, los Chiefs tienen un historial que demuestra que pueden hacerlo.
Contra Baltimore, limitaron a Derrick Henry a 46 yardas por tierra para preservar una victoria de 27-20.
Luego controlaron a Zack Moss de los Bengals. Hicieron lo mismo contra el corredor de los Falcons, Bijan Robinson, limitándolo a 31 yardas por tierra para una victoria por 26-22.
La semana pasada, los Chiefs limitaron a JK Dobbins de los Chargers a 32 yardas por tierra y remontaran para una victoria de 17-10 sobre sus rivales del Oeste de la AFC.
Tal vez haya tanto poder estelar en la defensiva de Kansas City como en la ofensiva.
Eso no quiere decir que no haya margen de mejora.
“Estamos cediendo demasiados puntos en algunas series”, reconoció Spagnuolo el viernes.
Esa es una buena manera de describir a los Chiefs: su ofensiva de alto perfil y su impresionante defensiva trabajando mano a mano, ayudándolos a superar una serie de lesiones y seguir siendo uno de los dos invictos que quedan en la NFL al comienzo de la Semana 5.