MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
En el Duna Arena de la capital húngara, este relevo español hizo un tiempo de 3:36.78 en las series clasificatorias de la sesión matutina, lo que significaba un nuevo récord nacional. Y luego por la tarde, el mismo cuarteto paró el cronómetro en 3:35.52, mejorando dicha plusmarca y culminando su actuación con esa sexta posición de una final cara.
Los rusos Miron Lifintsev, Kirill Prigoda, Arina Surkova y Daria Klepikova dieron la sorpresa al vencer con un registro de 3:30.47 por delante del 3:30.55 firmado por los estadounidenses Regan Smith, Lilly King, Dare Rose y Jack Alexy. El bronce fue para los canadieneses Ingrid Wilm, Finlay Knox, Ilya Kharun y Mary-Sophie Harvey, con 3:31.97.
Por otra parte, la también española Emma Carrasco terminó octava en la final individual de los 400 estilos. Durante el turno matinal, la ilerdense ya había marcado el corte de las finalistas con su 4:32.20; y en la sesión vespertina, fue de más a menos hasta repetir octavo lugar.
Carrasco llegó a ir cuarta (2:09.00) a la mitad de una carrera en la que las tres primeras marchaban a ritmo de récord del mundo. No en vano, la canadiense Summer McIntosh consiguió el oro con 4:15.48 y estableció un nuevo récord del mundo, arrebatándoselo a Mireia Belmonte (4:18.94).
La medalla de plata fue para la estadounidense Katie Grimes, con 4:20.14, y el bronce se lo colgó la británica Abbie Wood, con 4:24.34. Mientras, Carrasco acusó su osadía de las postas de mariposa y espalda, acabando en 4:31.18; pese a todo, supuso su mejor marca personal.