MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
Los hechos ocurrieron el pasado 27 de noviembre de 2022 en la previa al partido entre el Burgos CF y el Real Zaragoza en El Plantío, con un episodio de violencia entre ultras de Osasuna y el Burgos. Los once acusados, seis ultras del grupo Indar Gorri y cinco de Resaca Castellana, son ahora condenados por un delito de desórdenes públicos con motivo de celebración de eventos deportivos, con un agravante de discriminación por motivos ideológicos.
En este procedimiento, LaLiga estaba personada como acusación particular y durante la fase de instrucción impuso a los acusados medidas cautelares de prohibición de aproximación a estadios. El Juzgado condenó a los once acusados a las penas de 4 meses y 15 días de prisión y prohibición de aproximación a eventos deportivos de la misma naturaleza por plazo de 2 años, 4 meses y 15 días.
LaLiga "consolida un mensaje contundente contra la impunidad de quienes protagonizan episodios violentos en el fútbol advirtiendo de sobre las consecuencias legales que estas acciones conllevan", destacó el comunicado.